Es genial que quieras explorar tus talentos ocultos. Aquí te presento una serie de pasos prácticos que puedes seguir para descubrirlos:

1. Observa lo que te apasiona

Piensa en las cosas que te gusta hacer en tu tiempo libre. No pienses en lo que «deberías» hacer, sino en lo que realmente te atrae. ¿Qué actividades te hacen perder la noción del tiempo? ¿Qué temas te emocionan tanto que podrías hablar de ellos durante horas? Esto puede ser desde videojuegos y cocina, hasta resolver problemas de lógica o ayudar a la gente. A menudo, nuestros talentos están escondidos en nuestras pasiones.

2. Recuerda tu infancia

Piensa en lo que te gustaba hacer cuando eras niño. A menudo, de niños, nos dedicamos a actividades sin pensar en si somos «buenos» en ellas, simplemente porque nos divierten. Quizás te encantaba dibujar, construir cosas con LEGO, escribir cuentos o inventar juegos. Retomar esas actividades puede revelar habilidades que olvidaste.

3. Prueba cosas nuevas

La mejor manera de encontrar un talento oculto es buscándolo activamente. Sal de tu zona de confort y prueba nuevas actividades. Inscríbete en un taller de cerámica, toma una clase de programación, aprende a tocar un instrumento, únete a un grupo de senderismo o empieza a hacer videos para YouTube. Incluso si no te conviertes en un experto, el simple hecho de intentarlo puede revelar habilidades inesperadas.

4. Pide retroalimentación

A veces, otras personas ven cosas en nosotros que nosotros no vemos. Pregúntale a amigos, familiares o compañeros de trabajo: «¿En qué crees que soy bueno?» o «¿Qué cualidad mía admiras?». Presta especial atención a los cumplidos que recibes. Por ejemplo, si te dicen «Eres un gran oyente» o «Tienes una forma muy clara de explicar las cosas», podrían ser pistas de un talento.

Un ejercicio práctico:

Toma un cuaderno y divide una página en tres columnas:

1. Lo que me divierte: Anota todas las actividades que disfrutas, sin importar si te sientes «talentoso» en ellas.

2. Lo que se me da bien: Escribe las cosas en las que sabes que eres bueno, por pequeñas que sean.

3. Lo que otros dicen de mí: Enumera los cumplidos o comentarios positivos que has recibido sobre tus habilidades o personalidad.

Busca patrones y puntos en común entre las tres columnas. Esto te puede dar una idea clara de dónde residen tus talentos.

Descubrir un talento no es solo encontrar algo en lo que eres bueno, sino también encontrar algo que te haga sentir completo y feliz. ¡El proceso es una aventura en sí misma!